Foto:exolas.com
Vayamos por partes. Si observamos a los perros, encontramos una enorme diversidad de tamaños y características. Pero hay que tener en cuenta que se trata de razas de cría, no de variedades naturales. Lo que vemos es el resultado de siglos de cruces dirigidos por el ser humano.El origen biológico del perro sí está claro. Se trata, por explicarlo de una manera sencilla, de lobos domesticados. Esto supone un problema para cualquier estudio de este tipo. Porque siempre que se estudia la genética de estos animales, la mayor parte del esfuerzo se va en analizar los de razas de cría.
En este caso no ha sido así, al menos no completamente. Sí es cierto que la mayoría de los animales estudiados han sido “de pedrigree”, pero también se han estudiado “perros de aldea” - village dogs en inglés. Y la información que estos aportan es realmente interesante.
Muy bien, pero ¿qué dicen los resultados? Lo primero, que parece poco probable que la domesticación de los lobos haya ocurrido más de una vez. Esta era una de las ideas: que en distintos lugares del mundo, de manera independiente, los lobos se hubiesen ido acercando a los asentamientos humanos, y a partir del contacto se hubiesen domesticado.
Así que tiene que haber un origen. Un lugar del planeta en el que los lobos se “convirtiesen” en perros. Las muestras genéticas analizadas colocan el lugar en Asia Central, en una zona relativamente vaga entre Mongolia y Nepal.
Esta conclusión, curiosamente, entra en conflicto con otros estudios. El posible origen ha pasado por Europa, Oriente Medio e incluso Extremo Oriente. La fortaleza del estudio más reciente está en haber analizado también perros sin raza, algo que no es tan habitual. Pero las conclusiones no son, por desgracia, definitivas. Lo que sí queda claro es que la domesticación tuvo lugar en Asia, en algún lugar entre Mongolia – como defiende este estudio – y el sur de China, tal como plantean otros investigadores.
Fuente:Blog de noticias
No comments:
Post a Comment